El féretro con los restos de Juana Azurduy (1780-1862) fue trasladado hoy a la Casa de la Libertad de Sucre con motivo del homenaje a la heroína celebrado durante la visita oficial de Fernández, dentro de una sesión especial de la Asamblea Legislativa boliviana
Allí se leyó el decreto que Fernández dictó en julio de 2009 por el que ascendió post-morten a Azurduy como generala. Además, la presidenta argentina entregó a Morales un sable militar de esa categoría para acompañar los restos de la heroína.
En el mismo acto se acordó que el 12 de julio sea declarado Día de la Confraternidad Argentino-Boliviana, en recuerdo a la fecha de nacimiento de esta combatiente independentista.
Juana Azurduy, considerada la primera mujer que ingresó en el Ejército argentino, nació en 1780 en Toroca, entonces parte del virreinato del Alto Perú y ahora territorio boliviano, y murió en Sucre (Chuquisaca, Bolivia) el 25 de mayo de 1862.
Con su esposo, Manuel Ascensio Padilla, combatió contra las tropas españolas enviadas a Chuquisaca desde Buenos Aires, bajo el mando de Antonio González Balcarce, y luchó en el frente incluso estando embarazada, como hoy recordó Morales.
En 1813 estuvo a las órdenes de Manuel Belgrano, jefe del Ejército del Norte enviado desde Buenos Aires, organizó el llamado "Batallón de Leales" e incluso lideró la guerrilla que tomó el cerro de Potosí el 8 de marzo de 1816.
En agosto de ese año, ya con Argentina independiente, Azurduy recibió el rango de teniente coronel y fue autorizada a usar el traje del Ejército.
Juana perdió a cinco de sus hijos en el combate independentista y murió en la indigencia a punto de cumplir los 82 años.
Hoy, ante sus restos, Cristina Fernández destacó el ejemplo de Azurduy quien, dijo, "representa a los miles y miles de hombres y mujeres anónimos sin los cuales hubiera sido imposible la batalla contra el yugo colonial".
Lamentó que la historia oficial durante mucho tiempo haya olvidado "demasiado" a las mujeres que lucharon por la independencia de América del Sur y admitió que ella no conoció la figura de Azurduy durante sus estudios sino mucho después.
Recordó que fue la fallecida Mercedes Sosa la que popularizó a la guerrillera Juana con una canción y se mostró segura de que la artista habría estado hoy con ella en este homenaje.
En su intervención Fernández destacó además los dos tipos de libertades que ha tenido que conquistar Suramérica en los últimos 200 años, primero contra el "yugo colonial" y durante el siglo XX para poder designar a sus legítimos representantes con elecciones libres, democráticas y universales.
En esa idea abundó el presidente Evo Morales al afirmar que las armas de Juana Azurduy y de los demás héroes de la independencia han sido sustituidas en estos tiempos "con el voto consciente del pueblo boliviano para hacer profundas transformaciones" en su país.
"Quisiera que haya una Juana Azurduy que en este tiempo no levante armas, sino para seguir concienciando a nuestros pueblos para acabar con el colonialismo interno y externo", sostuvo.
Recordó que, en homenaje a la heroína, se ha creado en Bolivia el bono "Juana Azurduy", mediante el cual se entrega una renta a las mujeres embarazadas que asisten a chequeos regulares durante su gestación y, de esta forma, frenar la mortalidad materno infantil.
En la sesión de la Casa de la Libertad de Sucre, donde se fundó Bolivia en 1825, Morales impuso a Fernández la condecoración Cóndor de los Andes en el grado de Gran Collar, en reconocimiento a la "solidaridad" del Gobierno de Argentina con Bolivia. EFE
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